Artículo del historiador Josep Fontana que nos invita a pensar en las "semejanzas que hay entre la lógica de los campos de concentración y las políticas de austeridad que se nos imponen. Los fundamentos son los mismos: minimizar los costes del trabajo y eliminar el derroche de recursos que significa mantener a quienes no están en condiciones de producir. La reducción de costes salariales se ha conseguido con una medida genial, la “flexibilización del empleo”, que al dejar los trabajadores indefensos ante el paro, ahorra a los empresarios las molestias que antes causaban las disputas por el salario justo (¿qué sentido tiene hablar de “salario mínimo” cuando hay contratos de 0 horas?)."