Nos queda claro que la intención del estado es acallar las voces de organización y defensa de los derechos humanos independientes que existen en el país y limitar cada vez más nuestro derecho humano a la protesta social, así lo demuestran los hechos, todos los días se desaparece, ejecuta y encarcela a las personas por defender sus derechos. Por ello, sigue siendo necesario mantener la denuncia en lo nacional y lo Internacional, así como la organización y coordinación con otros esfuerzos para hacerle frente a esta política de Terrorismo de Estado que cada vez se hace más patente.