Alto a la persecución policíaca

COMUNICADO DE PRENSA

Denunciamos acoso, persecución y hostigamiento en nuestra contra: Jaqueline Santana, Wendy Reyes y Bryan Reyes

• Responsabilizamos al Gobierno del Distrito Federal y al Gobierno Federal de cualquier acto que atente contra nuestra vida e integridad física.

• Evitaremos el exilio, sin embargo, ante el incremento del acoso y hostigamiento lo hemos mirado como una opción.

México D.F. a 31 de agosto de 2015.

Jaqueline Santana, Wendy Reyes y Bryan Reyes, jóvenes activistas que abiertamente nos hemos manifestado contra las reformas estructurales de Enrique Peña Nieto y contra la forma violenta de mantenerlas en pie a toda costa, utilizando a las instituciones como una herramienta para aniquilar la consciencia y todos los logros heredados por nuestros antepasados, denunciamos públicamente el acoso, persecución y hostigamiento en nuestra contra, que en los últimos días ha ido incrementando.

La criminalización y represión contra nosotros fue evidente el 1 de diciembre de 2012 cuando Bryan Reyes fue detenido arbitrariamente horas antes de la manifestación que se realizó ese mismo día contra la toma de protesta de Enrique Peña Nieto.

Dos años más tarde, como muchos jóvenes y personas, iniciamos un abierto activismo, solidaridad y la exigencia de la aparición con vida de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala, Guerrero en septiembre de 2015.

A través de eventos sociales y culturales, en las manifestaciones y diversos actos públicos y políticos nos solidarizamos con las madres y padres de los normalistas desparecidos; con los estudiantes, así como con el movimiento social y organizaciones que hasta el día de hoy seguimos clamando justicia y exigiendo conocer las verdad.

Es así que el sábado 15 de noviembre 2014 Jaqueline Santana López, activista y estudiante de la Facultad e Economía de la UNAM y Bryan Reyes, activista y músico fuimos privados ilegalmente de la libertad.

Horas antes de que esto ocurriera, nos habíamos percatado de la presencia extraña de personas a las afueras de nuestra casa e informamos vía telefónica a nuestros familiares, y lo denunciamos públicamente vía redes sociales.

Tras la persecución y el espionaje fuimos privados ilegalmente de la libertad por policías vestidos de civil, quienes tras golpearnos nos subieron a un taxi, sin embargo al gritar y ser escuchados por un policía del Distrito Federal, los policías sin identificarse dijeron ser policías federales y se vieron obligados a llevarnos a la Delegación Venustiano Carranza.

En un inicio pensamos que se trataba de un secuestro, más tarde vimos que se trataba de una posible desaparición forzada que se vio frustrada por nuestros gritos y la gente que se acercó para saber lo que pasaba.

Sorpresivamente después conocimos que habíamos sido detenidos por elementos de la Coordinación de Operaciones Encubiertas de la Dirección General de Operaciones e Infiltración de la Policía Federal (PF) y que estábamos siendo acusados del robo a mano armada de un billete de quinientos pesos a una policía federal, un delito que evidentemente además de ser falso, no ameritaba la presencia de elementos de inteligencia.

La colusión de las autoridades nos mantuvo casi 8 meses presos, fuimos liberados el 10 de julio de 2015, desde nuestra salida hemos visibilizado y denunciado el incremento de las y los presos políticos en México como estrategia para disuadir al movimiento social y las irregularidades del sistema penitenciario; así como el uso desmedido de la fuerza y el espionaje, el cual ha ido avanzando de manera gradual a lo largo y ancho de nuestro país.

Desde entonces hemos documentado diversos actos de persecución, espionaje y hostigamiento en nuestra contra, y contra familiares y personas cercanas a nosotros, tales como vigilancia a las afueras de nuestra casa, seguimiento, intervención telefónica, hostigamiento vía redes sociales, entre otras.

Particularmente, el 18 y 22 de agosto de 2015 nos percatamos y documentamos el seguimiento y el espionaje que desembocó en la presencia de al menos diez hombres desconocidos a las afueras de nuestro domicilio, todos ellos merodeando con equipo de comunicación, señas, gesticulaciones corporales obvias de la vigilancia al departamento y persona, las personas que se encontraban afuera portaban también maletas y maletines negros.

Es así que con nuestras redes solidarias logramos salir del edificio y resguardarnos en un lugar seguro, desde ese entonces nos encontramos desplazados de nuestro domicilio.

El 21 de agosto de 2015 luego de haber tenido un encuentro musical en el espacio cultural Chanti Ollin, amigos cercanos a nosotros notaron que personas extrañas nos tomaban fotografías y video sin nuestro consentimiento, en momentos ajenos a la puesta en escena.

Asimismo Wendy Reyes, diseñadora gráfica, activista, hermana de Bryan Reyes y quien participó activamente en la denuncia de la detención arbitraria del 15 de noviembre, recibió el pasado 18 ó 19 de agosto de 2015 un citatorio para presentarse a comparecer sin especificar el motivo por el que se le citaba. Desde ese entonces Wendy ha sido perseguida, acosada y espiada. Como lo están siendo también otras personas y familiares cercanos que nos ha apoyado.

El 22 de agosto de 2015 aproximadamente a las 15:15 hrs cuando nos disponíamos a encontrarnos con una persona en el metro Sevilla, en el trayecto y mientras lo esperábamos notamos la presencia de sujetos extraños, fuimos objeto de vigilancia fuera y dentro del metro, fuimos seguidos por aproximadamente seis personas y en el marco de ese mismo hecho notamos la presencia extraña de un total de quince personas, entre ellos una mujer.

El 28 de agosto de 2015 luego de acudir a la conferencia de prensa “Evidenciar y denunciar el actuar del Estado” en la que al igual que otras víctimas denunciamos las agresiones en nuestra contra, fuimos objeto de seguimiento.

Es así que ante el incremento de agresiones en nuestra contra y para evitar daños irreversibles en contra de nuestra vida e integridad física: Jaqueline Santana, Wendy Reyes y Bryan Reyes responsabilizamos de nuestra seguridad y de la de las personas cercanas a nosotros a Miguel Ángel Mancera, Jefe de Gobierno del Distrito Federal y a las autoridades del Gobierno Federal, en toda su estructura.

Nos manifestamos en contra de la violencia policiaca consentida y alentada por sus gobiernos, en donde la persecución y el hostigamiento ha culminado muchas veces con la muerte o la desaparición forzada de quienes manifestamos nuestra oposición a las políticas neoliberales.

Hacemos público que hemos pensado en el exilio sin embargo, el compromiso con nuestro país y el reconocer la legitimidad de nuestras acciones, han hecho que nuestra prioridad sea que al igual que cientos de mexicanos y mexicanas podamos continuar exigiendo el cese a la violencia y el fin a esta grave crisis en materia de derechos humanos en nuestro país, en donde se anteponen los intereses económicos de unos cuantos frente a los derechos básicos de toda una sociedad.

¡Por la vida, la dignidad, la libertad y la autonomía avanzamos y luchamos!

Atentamente,
Jaqueline Santana, Wendy Reyes y Bryan Reyes

Correo de contacto: jamaicon@riseup.net;larsmelancolia@riseup.net