Comunicado desde Ayotzinapa sobre la represión del día 03 de junio de 2015

Comunicado desde Ayotzinapa sobre la represión de hoy:

Suspende Estado mexicano de facto derechos a la libertad de expresión y manifestación en Guerrero.

Tixtla, Guerrero, 03 de junio de 2015.- El día hoy alrededor de las 10 horas, cuando estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, junto con el comité de padres y madres de familia de los 43 normalistas desaparecidos de manera forzada desde el pasado 26 de septiembre en Iguala, se dirigían a Chilpancingo a realizar un acto de protesta pacífico para exigir la presentación con vida de sus hijos, en la carretera Tixtla-Chilpancingo en el tramo denominado Tierras Prietas junto a un túnel que se ubica sobre la referida carretera fueron interceptados por más de 500 policías Estatales, Federales y Elementos del Ejército Mexicano.

Sin explicación alguna y sin orden de autoridad competente los cuerpos policiacos y las fuerzas armadas impidieron el paso a los padres y madres de familia de los normalistas y a los estudiantes de Ayotzinapa que les acompañaban, refiriendo que no podían trasladarse a Chilpancingo, sin explicar los motivos de su proceder, exigiendo además sin justificación ni orden legal revisar los autobuses en los que se trasladaban.

Los estudiantes y padres de familia exigieron una explicación, justificación y orden de autoridad competente, pero éstos dijeron que no contaban con ello. Los padres de familia y estudiantes insistieron en pasar para realizar su protesta como parte de su derecho constitucional al ejercicio de la libertad de expresión. Como respuesta las fuerzas de seguridad empezaron a lanzar gases lacrimógenos y a golpearlos haciendo uso excesivo de la fuerza. El saldo es de dos estudiantes heridos de gravedad que responden a los nombres de Ricardo Carvo Santillán y Vicente Iturio Zuñiga que se encuentran hospitalizados recibiendo atención médica.

Con estas acciones ha quedado en evidencia que el Gobierno Federal y el Gobierno Estatal, con sus fuerzas represivas están incurriendo en graves violaciones a los derechos humanos, restringiendo e impidiendo, sin orden legal emitida por órgano de autoridad competente el libre ejercicio a la libertad de expresión y de protesta, los cuales están establecidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como en los tratados internacionales de derechos humanos.

Como normal de Ayotzinapa, padres y madres de familia agraviados por los deleznables hechos de Iguala perpetrados por la clase Política y el Estado–delincuencial hemos fijado nuestra posición política de inconformidad con las elecciones que tendrán lugar el próximo 7 de junio en Guerrero y otras partes de México. Dentro de los cauces institucionales solicitamos ante el Instituto Nacional Electoral (INE), la suspensión de las elecciones en esta Entidad, por nuestros desaparecidos y por las circunstancias de inseguridad que prevalecen. En su lugar propusimos celebrar un gran diálogo y debate vigoroso, democrático y plural en los que enumerácemos los graves problemas que nos aquejan, pero tales propuestas fueron desdeñadas y desoídas.

El proceso electoral continúa, los merolicos y cirqueros de la política siguen recorriendo nuestra Entidad despilfarrando cuantiosos recursos económicos, mientras los pueblos pobres y marginados se debaten en la miseria, el dolor y la impunidad, por ello reafirmamos nuestra decisión firme de NO A LAS ELECCIONES como una forma de protesta frente a un sistema político decrépito, corrupto e incapaz de resolver los graves problemas de nuestros Estado. Reiteramos que nuestra posición política y protesta se enmarcan dentro del ejercicio de la libertad de expresión propio de los regímenes democráticos, la democracia no solo se ejercita dentro de un proceso electoral y el voto, sino que se extiende a otras dimensiones del ámbito social y ejercicio de los derechos humanos como la libertad de expresión, la protesta, la libre manifestación y la libre determinación. Este ejercicio constitucional en modo alguno puede ser restringido y limitado sin justificación legal alguna. Por lo demás el Ejército Mexicano de acuerdo a los criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y de la Corte Interamericana de Derechos humanos no puede desempeñar tareas de seguridad pública si no cuenta con orden de autoridad, y mucho menos participar en disuasión de manifestaciones públicas como lo hace en Guerrero, pues esta es una práctica de los regímenes dictatoriales que tanto daño y violencia han generado en países del cono sur de Latinoamérica y en varios países de Europa durante los tiempos más oscuros de la represión y dictaduras militares.

Por ello la actuación del Estado mexicano, sus fuerzas de seguridad y armadas, que el día de hoy nos reprimieron, violan flagrantemente nuestros derechos humanos. No les bastó desaparecer y matar a nuestros hijos el 26 y 27 de septiembre, ahora se empeñan en acallarnos utilizando las fuerzas de seguridad y sus grupos de choque, como sucedió en Tlapa, Región de La Montaña de Guerrero, en días pasados. Por todo lo anterior llamamos a las organizaciones y colectivos nacionales e internacionales, solidarios y de derechos humanos a estar atentos a la actuación del Estado represor mexicano, pues este gobierno con su discurso de orden y paz encamina a nuestro país a un régimen autoritario y despótico, hoy los dinosaurios y chacales autoritarios que enlutaron por décadas a nuestro Estado se aprestan a dar el zarpazo y asaltar el poder político para volver por sus fueros y seguir pisoteándonos por otras décadas más.

Por lo tanto exigimos:
 Presentación con vida de nuestros 43 hijos y compañeros.
 No a las elecciones de narcogobiernos que matan y desaparecen. Respeto al ejercicio de la libertad de expresión.
 Castigo a los políticos y autoridades responsables materiales e intelectuales de los asesinatos de nuestros hijos y compañeros.