La guerra de la naturaleza

por Mumia Abu-Jamal

Tornados de más de 3 kilómetros de ancho. Azotando, arrancando, destrozando.

Vidas, tablas de madera, ladrillos, familias y corazones hechos trizas.

Edificios del tamaño de centros comerciales triturados como si fueran juguetes infantiles.

Coches, árboles, niñas, niños. ¡Dios mío! ¡Niñas y niños aventados al aire como hojas secas!

Aunque el hombre no creó esas fuerzas primordiales de la naturaleza, la vida industrial moderna con su infinidad de contaminantes no alivia los daños; por lo contrario, los exacerba.

Por eso nos golpean tormentas cada vez más tremendas, cada vez más feroces. La Naturaleza desata su rabia como una diosa furiosa ––desgarrando, azotando, arrancando y aplastando todo.

Remolinos de viento ante los cuales poca gente se atreve a ponerse de pie. Mientras tanto, los políticos debaten sobre si el cambio climático es real o no, a la vez que madres y padres sepultan a sus niñas y niños.

Ésta vez le tocó a Moore, Oklahoma.

Hay más por venir.

Desde la nación encarcelada soy Mumia Abu-Jamal.

 © ’13 maj

24 de mayo de 2013

Audio grabado por Noelle Hanrahan: www.prisonradio.org

Texto circulado por Fatirah Litestar01@aol.com

Traducción Amig@s de Mumia, México


Escribe una carta a Mumia a:

Mumia Abu-Jamal #AM8335
SCI Mahanoy
301 Morea Road
Frackville, PA 17932


"No voy a decirle a la gente qué hacer o cómo organizarse. Ya sabe hacerlo. Creo en
la gente. La gente nunca te falla. Hace lo correcto porque sabe en su corazón lo que
es correcto. Mis respetos." —MAJ